jueves, 13 de febrero de 2014

Mango, nubes, cigarras, dengue: Erradica en Asunción

Entre el ritmo agitado de los últimos dos meses con conciertos sin parar, con las cargas del trabajo, con las manifestaciones en las calles y con el desgaste físico, se hace casi imposible tener al día los anuncios de eventos y las reseñas, por lo que pido comprensión. Pero en medio de todo ese ritmo vertiginoso, hay un capitulo muy lindo, una banda chilena más que nos visitaba y con las que creábamos una amistad increíble: ERRADICA. Una vez más, los créditos van para Topo, quien fue el encargado de contactar con los chicos, armar las fechas, hacer la logística, darles alojamiento; ya saben, Do It Yourself. Si bien no conocíamos mucho esta banda, algunos, quizás lo habíamos escuchado después de leer los agradecimientos del cd de Intenta Detenerme (que hermoso es leer los inserts y conocer nuevas bandas a partir de los agradecimientos) nos encargamos de la difusión una vez más spameando por todos lados, especialmente en el facebook (si, a veces se le puede dar un uso útil a esa y otras redes sociales). Y bien; los chicos harían un mini tour por Posadas, Argentina; donde se presentaron en el Full Speed de los chicos de Push Play Discos, otros grandes amigos que demuestran que si uno quiere, la autogestión es el mejor camino. Siguiendo el tour, la segunda parada era Asunción, Paraguay y debían terminar en Campo Grande, Brasil; la última parada lastimosamente no surgió y en compensación se tuvo que hacer una fecha más en Asunción.

Llegaron el miércoles por la noche y fueron directamente a la casa de Topo, donde se acomodaban para los siguientes días. El jueves por la tarde se tomaron para recorrer parte de la ciudad y el centro, y donde los conocí, dándome cuenta que los chilenos que conozco hasta ahora, nunca defraudaron. La noche seguía en Sajonia, donde cenamos abundante menú vegan en casa y volvíamos a la casa de Topo para dormir ahí y preparar todo para el primer show del viernes. Llegaba el día del primer show y nos despertábamos al mediodía para dejar todo listo. Nanawa, el bar que a estas alturas es el lugar mas representativo del hardcore y el punk en Asunción, ya nos esperaba una vez mas con las puertas abiertas. Pero parece que no era nuestra noche, estábamos “salaos” como decían los chilenos.



El show empezó tarde por falta de un amplificador, ya que el que teníamos se había descompuesto, y unos platos, que como sabemos, es el gran problema de todos los bateristas. En fin, el ruido empezaba con Scratchy Noise, esta vez, en forma de trío. La nueva formación hizo que todos se muevan y de alguna manera, decirles que no se tarden tanto para volver a tocar, ya que lo hacían casi un año después, y justamente, al lado de una banda chilena nuevamente. Músicas rápidas, pegadizas, hicieron que los pibes se despierten y empiece el mosh. Pero la noche seguía, y seguían las bandas. Era el turno de Evil Assault, una banda que demuestra ya su peso y personalidad; y quienes serán teloneros de la legendaria banda brasilera Bandanos en nuestro país. Sus temas, bien compactos, mucha fuerza y una voz acorde al estilo era el resultado que nos presentaba esta banda. Nuevamente el mosh se hizo presente de parte de quienes a estas alturas ya esperaban ansiosos a Erradica. Pero debían esperar más, ya que Frenéticos empezaban a tocar con su peculiar sonido. Sin importarles mucho lo que los demás piensen, los temas iban pasando con furia y rapidez uno tras otro, así como los escupitajos de Duende al piso. Era el turno de nuestros visitantes. Erradica se cargaban los instrumentos al hombro y salían a dar lo mejor de sí. La respuesta de los chicos no se hizo esperar. Corriendo en vueltas, gente volando por los aires, chilenos tocando mientras se paseaban sobre los brazos del mosh, una fiesta increíble. Sorprendía como Lucas, el baterista, tocaba imparable e impecable aprovechando cada centímetro de la batería. Kevin y Diego no se quedaban atrás con la guitarra y el bajo; respectivamente.



 La voz potente de Diego, que antes de que el show empiece invito a todos y todas a entrar con una frase hermosa: “Esto lo hacemos entre todos, no solo nosotros”, le daba la potencia necesaria a cada tema. La gente pedía mas, y nos deleitaron con el clásico “Barricada” de Dos Minutos, para el delirio colectivo.



El set acababa y los chicos se retiraban dando lugar a otra banda que no veíamos hace un buen tiempo para cerrar la noche: Full Speed Ahead. Más rápidos y ebrios que nunca, desataban los gritos y el pogo de todos aquellos quienes apreciamos a esta banda; y de quienes esperamos toquen más seguido, se los extraña.



Así amanecía el sábado, los cabros descansaban, algunos trabajábamos, en fin, al mediodía estábamos de nuevo ya movilizándonos para lo que seria el segundo y ultimo show de Erradica en Asunción. Esta vez la cita era en Lado Adverso, un local muy bueno y acogedor que por cierto había cedido el local con la mejor disposición. Kria Kuervos se encargaba de romper el hielo, con el crustcore bien gritado por Lore, generando un buen pogo. Mente Salvaje seguía la fiesta, y dejan cada vez mas en claro que son una de las mejores bandas punk de Paraguay, regalando temas nuevos y provocando el agite del publico. La siguiente banda era Estampida, con un set de 10 temas rápidos y concisos de un hardcore sin cosas de sobra. Y luego; una vez más, los chilenos de Erradica se apoderaban del local. Una vez más, la fiesta se desataba; gente dando vueltas, exigiendo velocidad, inclusive coreando y pidiendo temas. Los cabros no decepcionaron en ningún momento a todos los que fueron a verlos. Así, con un set más largo que el día anterior, cerraban la gira por Paraguay. Pero la noche no terminaba allí. Repudio, una de las mejores bandas del universo; dejaban en claro que cuando tocan hay fiesta. Nadie paró de mover las cabezas en ningún momento, inclusive en un momento Diego de Erradica y Pedro se pusieron a improvisar un rap absurdo para el delirio de todos. Sarcoma de Kaposi cerraba el reci con toda la fuerza de su powerviolence de exportación. Al parecer nadie estaba cansado, ya que el pogo fue imparable. Sudados, cansados, pero felices, nos íbamos todos a nuestras casas.


Luego de tanto ajetreo de dos días, el domingo era el día de relax y despedida. Una linda tarde y noche con los chilenos, en medio de agua, calor y risas marcaba el hasta pronto.



Con promesas de volver, o que bandas de acá vayan para la tierra de la sopaipilla, nos prometíamos volver a vernos en algún lugar de este planeta. Y las promesas, hay que cumplirlas.


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